No existe la verdad absoluta.

Durante años me formé en la Medicina Convencional con el firme objetivo de ayudar a los pacientes.

No era suficiente.

Desperté mi consciencia y comencé a formarme en la Medicina Complementaria.

Y así nace la Medicina Integrativa.

Unimos el lazo que habitualmente separan la ciencia y la espiritualidad.

Desde una visión universal trabajamos la emoción y el pensamiento. El amor y la lógica.

Entendemos las enfermedades desde una perspectiva emocional donde el paciente es colaborador activo y toma las riendas de su intelecto, sus pensamientos, su organismo y sus emociones.

Cada persona necesita diferentes abordajes de su enfermedad, por lo que cada tratamiento es personalizado, incluso la misma enfermedad puede necesitar diferente tratamiento en distintas personas.

La Medicina Integrativa engloba la medicina convencional y la medicina natural con terapias complementarias para las cuales existen datos científicos de alta calidad sobre su seguridad y eficacia.

Nos centramos en las características singulares de la persona individual, basándose en la interacción de mente, cuerpo, espíritu y sociedad.

Considera al paciente como un colaborador activo que asume la responsabilidad personal de su salud.

La Medicina Integrativa se centra en la prevención y el mantenimiento de la salud con atención a las opciones de estilo de vida, que incluyen nutrición, ejercicio, control del estrés y bienestar emocional.

En esta medicina, utilizamos métodos basados en la evidencia científica derivado de múltiples fuentes de información para integrar el mejor tratamiento para el paciente, sea convencional o complementario.

Ciencia y espiritualidad se han unido para ayudarte a superar tus etapas de dolor.